El BMW i8 Spyder básicamente es una versión convertible de la versión coupé. Cuenta con características propias como una distancia entre ejes acortada, faros láser, un capó semi-transparente y un parabrisas desenfadado con un spoiler integrado. En la parte trasera encontramos un difusor, salidas de aire “tridimensionales” y las luces traseras en forma de U.
La cabina está elegantemente decorada con tapicería de cuero, asientos de fibra de carbono y detalles en negro piano. También hay un cuadro de instrumentos digital y una pantalla de iDrive en tres dimensiones.
Se trata de un plug-in híbrido que cuenta con un motor eléctrico de 131 CV y un motor de gasolina tricilíndrico de 223 CV. El motor eléctrico es el encargado de mover el eje delantero, mientras que el motor de gasolina mueve el eje trasero. Esta configuración le da al coche un sistema de tracción total, así como una potencia combinada de 354 CV con un par motor de 550 Nm. Esto permite al BMW i8 Spyder una aceleración de 0 a 100 Km/h en 5 segundos y es capaz de alcanzar una velocidad máxima de 250 Km/h.
Pero aún queda lo más importante, las baterías de iones de litio permiten al i8 Spyder viajar hasta un máximo de 30 kilómetros en modo totalmente eléctrico. Esto, sin duda, ayuda a obtener un espectacular consumo combinado de combustible de tan solo 3 l/100 Km.
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